Mi viaje literario 2012-2023

Durante más de una década, mis lecturas han sido una constante en mi vida, marcadas por descubrimientos inolvidables y algunos desatinos literarios. Desde 2012 he llevado un registro cuidadoso que hoy me permite compartir un recorrido por lo mejor y lo peor de cada año. ¿Quieres saber cuáles fueron esos libros que me emocionaron o me dejaron perpleja? ¡Acompáñame en este viaje literario!

2012

Mejor lectura: No confíes en nadie de S.J. Watson

En 2012, descubrí esta apasionante novela que me dejó sin aliento. No confíes en nadie es un thriller psicológico que cuenta la historia de una mujer que despierta cada día sin recordar nada debido a una amnesia severa. A través de un diario, intenta reconstruir su vida y desentrañar los misterios que la rodean. Con giros de guion impactantes y una atmósfera de tensión constante, esta novela me mantuvo en vilo desde la primera hasta la última página. ¡Totalmente recomendada! Además, tiene adaptación cinematográfica con Nicole Kidman como protagonista.

Peor lectura: Zonas húmedas de Charlotte Rocher

En contraste, Zonas húmedas fue una experiencia bastante chocante. Este libro, leído en el marco de un taller de lectura, me dejó perpleja con su narrativa provocadora y sus temas controvertidos. La protagonista realiza acciones inusuales, como usar un hueso de aguacate de forma inusual (metérselo en la vagina), lo que hizo que la lectura fuera de lo más bizarra y chocante. Aunque entiendo su intención de transgredir, la obra no conectó conmigo en absoluto.

2013

Mejor lectura: Habitaciones cerradas de Care Santos

Este año, una de mis lecturas más destacadas fue Habitaciones cerradas, una novela histórica ambientada en la Barcelona modernista. A través de una saga familiar ficticia, Care Santos mezcla intriga, romance y tragedia con una documentación histórica impecable. La profundidad de los personajes y la reconstrucción de época me hicieron disfrutar cada página. ¡Una obra altamente recomendable!

Peor lectura: El cielo en un infierno cabe de Cristina López Barrio

Lamentablemente, mi peor lectura del año fue esta novela de Cristina López Barrio. Aunque el libro prometía una ambientación histórica interesante, no logró cautivarme. Su falta de ritmo y personajes poco memorables hicieron que terminara la lectura sin haber conectado realmente con la historia.

2014

Mejor lectura: Cometas en el cielo de Khaled Hosseini

En 2014, leí por primera vez Cometas en el cielo, una obra que me marcó profundamente. Ambientada en Afganistán y Estados Unidos, la novela explora temas de amistad, culpa y redención. La narrativa emotiva de Hosseini, combinada con una poderosa adaptación cinematográfica, hace de esta lectura una experiencia inolvidable. Recomiendo leer primero el libro antes de ver la película para captar todos los matices de esta conmovedora historia.

Peor lectura: Baila, baila, baila de Haruki Murakami

Por otro lado, mi encuentro con Murakami en 2014 fue desafortunado. Baila, baila, baila resultó ser una lectura confusa y totalmente sin sentido para mí. Aunque sé que este autor tiene una legión de apasionados seguidores, yo no logré conectar con su estilo. Quizás en el futuro le dé otra oportunidad, pero esta novela, desde luego, no fue para mí.

2015

Mejor lectura: La cena de los idiotas de Francis Veber

En 2015, destaco La cena de los idiotas. Esta obra, conocida por sus adaptaciones cinematográficas (primero la francesa y luego la norteamericana), mezcla humor negro y crítica social de manera brillante. La historia sigue a un grupo de amigos que organizan cenas para invitar a las personas más «idiotas» que puedan encontrar, pero las cosas toman giros inesperados. Una lectura inteligente y divertida que recomiendo para pasar un buen rato y reflexionar sobre lo idiotas que somos todos.

Peor lectura: El bigote de Emmanuel Carrère

Mi peor experiencia literaria de ese año fue con El bigote. Aunque Carrère es un autor aclamado, esta obra no logró cautivarme. La trama gira en torno a un hombre que se afeita el bigote, y nadie parece notar el cambio, llevándolo a una crisis existencial. La narrativa se siente como un bucle sin resolución clara, lo que hizo que la lectura fuera frustrante y poco memorable. No logré pillarle el punto.

2016

Mejor lectura: Un hombre llamado Ove de Fredrik Backman

Este año me enamoré de Un hombre llamado Ove, una historia conmovedora sobre un anciano cascarrabias que encuentra nuevos propósitos en la vida gracias a sus nuevos vecinos. La narrativa combina humor y ternura de manera magistral. Aunque la adaptación cinematográfica sueca y la americana con Tom Hanks son interesantes, para mí, el libro supera ambas. ¡Una joya literaria que recomiendo sin dudar!

Peor lectura: Luces en el mar de Miquel Reina.

Lamentablemente, Luces en el mar no cumplió con mis expectativas. Aunque la premisa de una casa que flota en el mar tras desprenderse de un acantilado con dos abueletes dentro parecía emocionante, la narrativa abusó del drama y dejó de ser creíble. Fue una decepción, especialmente porque había leído reseñas muy prometedoras.

2017

Mejor lectura: El cuento de la criada de Margaret Atwood

La adaptación de El cuento de la criada a serie de televisión me llevó a descubrir esta obra literaria. Escrita en los años 80, la novela presenta una distopía impactante en la que las mujeres son reducidas a objetos reproductivos en un régimen totalitario. Su poderosa narrativa invita a reflexionar sobre los derechos de las mujeres y la fragilidad de las libertades sociales. Una lectura dura, densa, opresiva y a veces desesperante, pero imprescindible.

Peor lectura: Todas mis fotos hablan de ti de Cristina Maruri

En el lado opuesto, Todas mis fotos hablan de ti resultó ser una decepción. La trama, centrada en una relación nacida a través de Instagram, careció de profundidad y terminó abruptamente. Además, la sensación de que el final estaba diseñado para forzar una secuela no ayudó a mejorar mi percepción de la obra. Para mí, fue una pérdida de tiempo y una tomadura de pelo…

2018

Mejor lectura: Los días iguales de Ana Ribera «Molinos»

2018 fue un año de pocas lecturas, pero entre ellas destacó Los días iguales, una obra que aborda la depresión desde una perspectiva íntima y reflexiva. La autora comparte su experiencia personal, plasmando de manera auténtica cómo esta enfermedad te hace sentir que todos los días son iguales en un bucle infinito. Este libro no solo me ayudó a comprender mejor esta condición, sino que también me impactó por su sensibilidad y honestidad. Una lectura valiosa y muy recomendable.

Peor lectura: No hubo ninguna mala lectura en 2018.

2019

Mejor lectura: Tigres de cristal de Toni Hill

En 2019, mi elección fue Tigres de cristal, un thriller ambientado en Barcelona que entrelaza amistad, venganza y redención. La historia sigue a un grupo de amigos de la infancia y las consecuencias de sus actos años después. Toni Hill es un autor que nunca me decepciona, y esta novela no fue la excepción. Su habilidad para crear personajes complejos y atmósferas envolventes lo convierte en uno de mis escritores favoritos. Sé que si leo algo escrito por Toni Hill lo voy a disfrutar.

Peor lectura: El día que se perdió el amor de Javier Castillo

Lamentablemente, la lectura de este thriller no cumplió con mis expectativas. Aunque el inicio prometía, con una imagen impactante de un personaje caminando por la carretera con una cabeza humana en la mano chorreando sandre, la narrativa se desinfló página a página. La ejecución dejó mucho que desear, y el desenlace fue insatisfactorio. Aunque le di otra oportunidad al autor con la segunda parte, tampoco logró convencerme.

2020

Mejor lectura: 423 colores de Juan Gallardo y Rafael Avendaño

Uno de los libros más emotivos que leí en 2020 fue 423 colores. La historia de Gada, una niña ciega de nacimiento que vive en Siria durante la guerra, es tan conmovedora como desgarradora. A través de su inocencia y valentía, los autores nos sumergen en una narrativa que combina reflexión y emoción. Es un libro que recomiendo para todas las edades, ya que invita a valorar la vida y a reflexionar sobre la resiliencia humana.

Menos destacable: Guerra y paz de León Tolstói

En 2020 me embarqué en el reto personal de leer Guerra y paz. Aunque valoro la experiencia y el mérito de haberlo terminado, no puedo decir que disfruté la parte dedicada a las guerras napoleónicas. Sin embargo, los momentos dedicados a la vida personal de los personajes y sus intrigas sociales fueron mucho más interesantes. Es un clásico que aprecio haber leído, pero no creo que lo relea en el futuro.

2021

Mejor lectura: Ensayo sobre la ceguera de José Saramago

En 2021, redescubrí la genialidad de José Saramago con una relectura de Ensayo sobre la ceguera. Este libro, que plantea una epidemia ficticia de ceguera blanca, resuena de manera inquietante tras la experiencia de la pandemia. La narrativa ágil y única del autor, combinada con su análisis profundo de la naturaleza humana, lo convierten en una obra imprescindible. Aunque su estilo sin pausas puede ser un desafío, recomiendo con entusiasmo esta novela.

Peor lectura: Amor se escribe sin hache de Enrique Jardiel Poncela

Por otro lado, mi peor lectura de este año fue Amor se escribe sin hache. Aunque disfruto de las obras de teatro de Jardiel Poncela, esta novela no logró convencerme. Su contenido machista, aunque comprensible en el contexto de su época y con sus vivencias personales, no encajó conmigo. Aunque tiene momentos humorísticos, el tono general hizo que no disfrutara de la lectura. Es una pena, pero no consigo separar persona de autor, y en este caso Jardiel Poncela era un señoro, señoro.

2022

Mejor lectura: La chica salvaje de Delia Owens

Uno de los libros más potentes que leí en 2022 fue La chica salvaje. Esta novela, que combina elementos de thriller con una profunda conexión con la naturaleza, narra la vida de una joven que crece en soledad en las marismas. Aunque la adaptación cinematográfica no logra captar toda la intensidad de la historia, el libro destaca por su narrativa envolvente y su capacidad para explorar la relación del ser humano con la soledad y el medio ambiente. Es una lectura que deja huella. Con este libro lloré y sufrí por Kya lo que no está escrito.

Peor lectura: Firmamento de Máxim Huerta

En el lado opuesto, Firmamento fue una de mis mayores decepciones literarias. La narrativa careció de profundidad y cohesión, dejándome con la sensación de estar leyendo una historia inacabada. Aunque respeto al autor, esta obra no cumplió con mis expectativas en absoluto.

2023

Mejor lectura: Lecciones de química de Bonnie Garmus

El libro que más me emocionó en 2023 fue Lecciones de química. Ambientada en los años 50-60, sigue la vida de Elizabeth, una madre soltera que desafía los roles de género establecidos. Esta novela combina humor, drama y reflexión social de manera magistral. Además de su narrativa atrapante, los personajes secundarios, como el perro, la niña y la vecina, añaden una profundidad encantadora a la historia. Es un libro que recomiendo sin reservas.

Peor lectura: Los elegidos de Nando López

A pesar de admirar a Nando López como autor, Los elegidos no cumplió con mis expectativas. Aunque aborda temas relevantes como la represión franquista y los campos de concentración para homosexuales, la narrativa careció de cohesión. Algunas partes parecían demasiado apresuradas, mientras que otras se extendieron más de lo necesario. Aunque tenía potencial, no logró engancharme.

Conclusión: una década de lecturas y lecciones

Mirar atrás y analizar mis lecturas desde 2012 hasta 2023 ha sido una experiencia reveladora. Cada libro, ya sea una joya literaria o una decepción, ha dejado una huella en mi camino como lectora. Este ejercicio no solo me ha permitido reflexionar sobre cómo han evolucionado mis gustos, sino también sobre el impacto que las historias pueden tener en diferentes momentos de nuestra vida.

Los mejores libros me han emocionado, inspirado y desafiado a ver el mundo desde nuevas perspectivas, mientras que los peores han sido oportunidades para aprender qué tipo de narrativa no resuena conmigo. Estoy agradecida por cada página leída y espero que esta lista te inspire a explorar algunas de estas obras, ya sea para disfrutarlas o para evitar ciertas experiencias menos memorables.

¿Cuáles han sido tus mejores y peores lecturas de los últimos años? ¡Déjame un comentario con tus recomendaciones o desastres literarios! Estoy deseando leer tus experiencias y quizás añadir algún título interesante a mi lista para 2025.

Preguntas Frecuentes

¿Cómo seleccionaste las mejores y peores lecturas de cada año?

Utilicé mi registro de lecturas. Primero lo hacía en un GoogleDocs. Luego lo pasé a Goodreads, donde puntúo los libros que leo anualmente. Me enfoqué en aquellos que recibieron la puntuación más alta y más baja según mi experiencia personal.

¿Por qué algunos libros te parecieron tan malos?

Las peores lecturas no siempre son «malos libros» en términos objetivos. A menudo, simplemente no conectaron conmigo, ya sea por la narrativa, los personajes o porque no cumplían con mis expectativas personales.

¿Qué libro recomendarías leer primero de esta lista?

Si buscas algo conmovedor y profundo, te recomiendo comenzar con La chica salvaje de Delia Owens o Lecciones de química de Bonnie Garmus. Ambos son historias potentes que dejan huella.

¿Qué opinas sobre abandonar un libro que no gusta?

Con el tiempo he aprendido que está bien abandonar un libro que no resuena contigo. La lectura debe ser placentera, no una tortura. Ahora prefiero invertir mi tiempo en libros que realmente disfruto.

¿Cuáles son tus expectativas para las lecturas de 2025?

Estoy emocionada por explorar nuevas historias y quizás darle otra oportunidad a autores que no me gustaron en el pasado. Además, espero descubrir géneros o estilos que me sorprendan.